Altotonga, ¿pueblo mágico?

Visité la semana pasada Altotonga, un municipio ubicado a 75 kilómetros de Xalapa, que puede uno recorrer en poco más de una hora, a velocidad moderada.

Ese día fresco y agradable nos sorprendió con el “rumor” de que había caído un avión en la zona. De inmediato el alcalde Nacho Morales Guevara fue enterado de que en realidad se trataba de un sobrevuelo de aviones F5 de la Fuerza Aérea Mexicana. Nada de qué preocuparse.

En su despacho de palacio municipal, mientras atendía a un grupo de maestros y a vecinos de su municipio, el presidente nos habló —entre muchos otros temas— de la triste realidad que sufren los municipios veracruzanos en los cambios de administración: los que se van se llevan todo lo que pueden y dejan puras cosas viejas. No tuvo que explicarme mucho, porque me bastó ver el sillón de su oficina, todo descascarado.

El tema no es nuevo en los palacios municipales. Recuerdo que un viejo sacerdote hace muchos años me contaba que lo mismo ocurría en los cambios de parroquias. Un día, un párroco se llevó hasta los muebles del baño, a pesar de que finalmente habían sido comprados con dinero del pueblo que llegó por vía de las limosnas. Lo mismo pasa cada tres o cuatro años en los cambios de gobiernos municipales.

El gobierno que concluyó en diciembre de 2021 entregó una administración con servicios públicos “prácticamente destruidos”, sin limpia pública, sin alumbrado, con una red de agua potable inoperante y con la policía municipal intervenida, me comentó Nacho Morales sin mencionar por su nombre a Ernesto Ruiz Flandes, un munícipe que fue acusado de todo, hasta de violencia política de género.

Por ello, me comenta el nuevo edil, en los primeros cien días buscará transformar el rostro de Altotonga y durante el actual gobierno recuperaremos su grandeza. Atareado, dice que los primeros días del naciente año y gobierno, han sido intensos, porque la gente no quiere pretextos sino soluciones, atención inmediata. —¿Qué queremos para Altotonga?, se pregunta y enfático, responde, “ser nuevamente el destino turístico que en otros tiempos fuimos”.

Y así, comenta, que además de la gastronomía extraordinaria, del café de altura, de los helados o las típicas garnachitas, en Altotonga los visitantes podrán disfrutar de las frescas y cristalinas aguas del Río Pancho Poza o el Bosque de Zoatzíngo.

“Vamos a rescatar estos espacios que hoy se encuentran en deplorables condiciones y los vamos a impulsar. Vamos a apostar por el turismo, para que sea parte de la economía fundamental de Altotonga”. Además, añade, el gobierno municipal hará alianzas estratégicas con el Gobierno del Estado de Veracruz y a través de la Secretaría de Desarrollo Económico buscaremos respaldar a aquellas empresas que le dan trabajo a más de 12 mil personas en la maquila en Altotonga.

Nacho Morales Guevara me insiste en la proyección turística de esta demarcación y del trabajo que realizarán para que Altotonga pueda inscribirse en la lista de los pueblos mágicos del país. “Se volvió a abrir la ventanilla de Pueblos Mágicos en lo cual vamos a participar. Para calificar trabajaremos mucho en mejorar la imagen urbana del centro. Habrá un cambio total en el parque, en el palacio municipal que hoy me lo dejan totalmente deteriorado, en el atrio de la iglesia, vamos a ir por las escalinatas, los portales. Haremos un proyecto integral, interesante, bonito, donde vamos a tener, sin lugar a dudas, uno de los municipios más pintorescos del estado de Veracruz y de México”, concluye. Ojalá así sea.

Nos vemos los jueves.

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