/ viernes 21 de enero de 2022

Créditos de nómina, deudas que empobrecen

A fines del año 2021 recibí de parte del Instituto Brasileño de Defensa del Consumidor (Idec) la invitación para escribir un artículo sobre el tema de los créditos de nómina (con cobranza delegada) en México, a fin de establecer una comparativa con el Crédito Consignado, como se le llama en Brasil a la misma figura crediticia.

La inquietud de la periodista responsable de la edición de la revista Do Idec (revista del consumidor) era conocer más sobre la regulación legal que actualmente tiene esa modalidad de crédito en nuestro país, así como los impactos del uso de los mismos en los usuarios o consumidores; invitación que acepté con muchísimo gusto, y honrada desde luego de ser considerada para hacer una aportación que, sin duda, tendrá repercusiones a nivel internacional.

Pues la lucha que ha emprendido el Barzón en rechazo y reclamo de las políticas con que son operados estos créditos que han contribuido, en gran medida, al empobrecimiento de los acreditados, si bien pareciera que en Veracruz ha encontrado solo oídos sordos por parte de los actuales titulares de dependencias gubernamentales para comprender el grave daño que se causa a los maestros, a los pensionados, jubilados, empleados al servicio de la salud y a todos aquellos trabajadores del estado, a quienes quincenalmente se les “mutila” de modo hasta cierto punto ilegal, su sueldo para pagar a las financieras deudas eternas.

Parece estar traspasando fronteras y tener eco a nivel global, en donde otros países padecen de lo mismo, ante la complacencia y la indiferencia de parte de las propias autoridades a quienes se les ha encargado la tutela de consumidores y usuarios de servicios financieros.

Por su parte, el Instituto Brasileño del Consumidor lleva también una gran brecha en el estudio interno del asunto, acompañado de gestiones que a su vez, han realizado ante sus propias autoridades, al recoger los reclamos que los consumidores les hacen llegar sobre los abusos que padecen de parte de los otorgantes de crédito en esta modalidad.

Pareciera sin duda, que no hablamos idiomas tan diferentes y que los brasileños han tomado al igual que los barzonistas, un papel protagónico en el reclamo de lo que estos créditos que vulneran los ingresos de los usuarios han hecho con el patrimonio y la dignidad de los destinatarios.

Entre los abusos podemos considerar las altas tasas de interés que estos créditos que se pagan mediante el descuento directo de la nómina de los trabajadores generan a los usuarios; tasas que debieran ser moderadas y menores a lo que se cobra por un préstamo personal de similar naturaleza, pues tienen el “plus” de ser poco riesgosos para quienes los otorgan, debido a que precisamente toman el salario como fuente de pago de los mismos.

Otro abuso que se cuenta entre las similitudes es el relativo al ofrecimiento constante de más y más préstamos, cuando apenas si se acaba de contratar el anterior o cuando ya se está por finalizar, sometiendo a los acreditados a una cadena interminable de pago y sobreendeudamiento, que en lugar de ayudarlos, merma su capacidad de pago, pues necesitan recurrir a otras fuentes de liquidez para poder solventar sus necesidades.

De modo que los casos más graves son aquellos en donde se ha logrado detectar que los jubilados y pensionados llegan a estar tan sobreendeudados que tienen que pedir prestado casi, casi, para poder comer.

Es de recordar que en el mes de marzo del año pasado integramos una de las voces más fuertes de reclamo en contra de la iniciativa que aún está por subir al pleno de la Cámara de Diputados, exigiendo las modificaciones pertinentes al respecto, pues esa iniciativa que versa sobre legalizar una práctica que lleva por lo menos 15 años de contribuir al empobrecimiento de los pensionados y trabajadores del estado en nuestro país, no puede ni debe ser aprobada.

Comparto con todos ustedes esta alegría de poder contribuir con este organismo internacional con una pequeña aportación ideológica y de experiencia a la lucha constante por hacer de este mundo un lugar más justo para todos desde la trinchera que el Barzón ha creado para defender la dignidad y el patrimonio de los mexicanos. Llama al 2281148502.

web: www.elbarzonrc.org

mail: elbarzonrc@yahoo.com.mx

twitter: @terecarbajal

www.elbarzonrc.org

A fines del año 2021 recibí de parte del Instituto Brasileño de Defensa del Consumidor (Idec) la invitación para escribir un artículo sobre el tema de los créditos de nómina (con cobranza delegada) en México, a fin de establecer una comparativa con el Crédito Consignado, como se le llama en Brasil a la misma figura crediticia.

La inquietud de la periodista responsable de la edición de la revista Do Idec (revista del consumidor) era conocer más sobre la regulación legal que actualmente tiene esa modalidad de crédito en nuestro país, así como los impactos del uso de los mismos en los usuarios o consumidores; invitación que acepté con muchísimo gusto, y honrada desde luego de ser considerada para hacer una aportación que, sin duda, tendrá repercusiones a nivel internacional.

Pues la lucha que ha emprendido el Barzón en rechazo y reclamo de las políticas con que son operados estos créditos que han contribuido, en gran medida, al empobrecimiento de los acreditados, si bien pareciera que en Veracruz ha encontrado solo oídos sordos por parte de los actuales titulares de dependencias gubernamentales para comprender el grave daño que se causa a los maestros, a los pensionados, jubilados, empleados al servicio de la salud y a todos aquellos trabajadores del estado, a quienes quincenalmente se les “mutila” de modo hasta cierto punto ilegal, su sueldo para pagar a las financieras deudas eternas.

Parece estar traspasando fronteras y tener eco a nivel global, en donde otros países padecen de lo mismo, ante la complacencia y la indiferencia de parte de las propias autoridades a quienes se les ha encargado la tutela de consumidores y usuarios de servicios financieros.

Por su parte, el Instituto Brasileño del Consumidor lleva también una gran brecha en el estudio interno del asunto, acompañado de gestiones que a su vez, han realizado ante sus propias autoridades, al recoger los reclamos que los consumidores les hacen llegar sobre los abusos que padecen de parte de los otorgantes de crédito en esta modalidad.

Pareciera sin duda, que no hablamos idiomas tan diferentes y que los brasileños han tomado al igual que los barzonistas, un papel protagónico en el reclamo de lo que estos créditos que vulneran los ingresos de los usuarios han hecho con el patrimonio y la dignidad de los destinatarios.

Entre los abusos podemos considerar las altas tasas de interés que estos créditos que se pagan mediante el descuento directo de la nómina de los trabajadores generan a los usuarios; tasas que debieran ser moderadas y menores a lo que se cobra por un préstamo personal de similar naturaleza, pues tienen el “plus” de ser poco riesgosos para quienes los otorgan, debido a que precisamente toman el salario como fuente de pago de los mismos.

Otro abuso que se cuenta entre las similitudes es el relativo al ofrecimiento constante de más y más préstamos, cuando apenas si se acaba de contratar el anterior o cuando ya se está por finalizar, sometiendo a los acreditados a una cadena interminable de pago y sobreendeudamiento, que en lugar de ayudarlos, merma su capacidad de pago, pues necesitan recurrir a otras fuentes de liquidez para poder solventar sus necesidades.

De modo que los casos más graves son aquellos en donde se ha logrado detectar que los jubilados y pensionados llegan a estar tan sobreendeudados que tienen que pedir prestado casi, casi, para poder comer.

Es de recordar que en el mes de marzo del año pasado integramos una de las voces más fuertes de reclamo en contra de la iniciativa que aún está por subir al pleno de la Cámara de Diputados, exigiendo las modificaciones pertinentes al respecto, pues esa iniciativa que versa sobre legalizar una práctica que lleva por lo menos 15 años de contribuir al empobrecimiento de los pensionados y trabajadores del estado en nuestro país, no puede ni debe ser aprobada.

Comparto con todos ustedes esta alegría de poder contribuir con este organismo internacional con una pequeña aportación ideológica y de experiencia a la lucha constante por hacer de este mundo un lugar más justo para todos desde la trinchera que el Barzón ha creado para defender la dignidad y el patrimonio de los mexicanos. Llama al 2281148502.

web: www.elbarzonrc.org

mail: elbarzonrc@yahoo.com.mx

twitter: @terecarbajal

www.elbarzonrc.org