/ lunes 6 de septiembre de 2021

Julen, costosa impericia

El senador panista Julen Rementería del Puerto se metió entre las patas de los caballos sin medir consecuencias, y por esa razón ha resultado severamente cuestionado hasta en su propio partido.

La imprudencia, o impericia política del coordinador de su bancada en la Cámara Alta, al identificarse con la organización ultraderechista española Vox, y firmar con un grupo de sus pares la “carta de Madrid” en contra del avance del comunismo en México y países de Hispanoamérica, sólo sirvió a los adversarios de fuera para golpear al PAN, y desde el interior, poner en duda el liderazgo nacional encabezado por Marko Cortés. No sirvió de mucho el control de daños que operó el CEN panista bajo el argumento de que la firma de esa alianza fue cuestión personal de Julen y algunos senadores azules, pues la crítica ya había permeado por venir de viejos militantes como Gustavo Madero, Roberto Gil Zuarth, Xóchitl Gálvez, y hasta del ex presidente Felipe Calderón, ya desligado de ese partido, y sirvió de coyuntura para la burla del presidente Andrés Manuel López Obrador, Claudia Sheiumban y otros dirigentes morenistas, entre ellos la diputada federal electa Rosa María Hernández Espejo, de Veracruz, al señalar que al fin los panistas se habían quitado la máscara para mostrar su verdadero rostro de fascistas, episodio este, como muchos otros que vendrán antes del 2024 y van a servir para ir desgastando ante la opinión pública a los partidos y figuras que se perfilan a participar para la presidencia de la República. Los morenos, sin embargo, no quisieran que se recuerde de ellos que, en momentos cruciales como en 2018, recurrieron a la alianza con el Partido Encuentro Social (PES), también identificado con la ultraderecha, para lograr sus fines políticos. Es un ajedrez. Del PAN, desde hace muchos años se ha dicho que está vinculado al movimiento ultraconservador El Yunque que reclutaba a jóvenes para adoctrinarlos en su filosofía, con fines políticos, es decir, no es algo nuevo. Sin embargo, el asunto alcanzó un doble daño, externo e interno, y tardará mucho tiempo para resarcir. Julen, a su vez, va a sufrir las consecuencias dentro de su bancada en el Senado donde probablemente pierda margen de maniobra en su operación, y en el propio Comité Ejecutivo Nacional panista, donde se había posicionado como prospecto emergente a la gubernatura del estado, en caso de que el actual régimen logre descarrilar a los Yunes para impedirles una segunda oportunidad para apoderarse del Gobierno del Estado, como parece que están a punto de lograrlo, si es que prosperan las denuncias en contra del fallido candidato a la alcaldía de Veracruz, Miguel Ángel Yunes Márquez, y su hermano Fernando, actual edil porteño. De ahí que, desde el propio puerto, también se lanzan cañonazos a Julen, aprovechando que se encuentra en el ojo del huracán por el error táctico que cometió. Lo hacen los hermanos panistas y se sumó la académica Hernández Espejo, exigiendo al senador disculparse con el pueblo de México por haber utilizado la sede del Senado para suscribir un acuerdo con esa organización española facciosa, pero en el fondo es ir disminuyendo la capacidad política a Julen, para lo que pudiera ofrecerse más adelante.

opedro2006@gmail.com

El senador panista Julen Rementería del Puerto se metió entre las patas de los caballos sin medir consecuencias, y por esa razón ha resultado severamente cuestionado hasta en su propio partido.

La imprudencia, o impericia política del coordinador de su bancada en la Cámara Alta, al identificarse con la organización ultraderechista española Vox, y firmar con un grupo de sus pares la “carta de Madrid” en contra del avance del comunismo en México y países de Hispanoamérica, sólo sirvió a los adversarios de fuera para golpear al PAN, y desde el interior, poner en duda el liderazgo nacional encabezado por Marko Cortés. No sirvió de mucho el control de daños que operó el CEN panista bajo el argumento de que la firma de esa alianza fue cuestión personal de Julen y algunos senadores azules, pues la crítica ya había permeado por venir de viejos militantes como Gustavo Madero, Roberto Gil Zuarth, Xóchitl Gálvez, y hasta del ex presidente Felipe Calderón, ya desligado de ese partido, y sirvió de coyuntura para la burla del presidente Andrés Manuel López Obrador, Claudia Sheiumban y otros dirigentes morenistas, entre ellos la diputada federal electa Rosa María Hernández Espejo, de Veracruz, al señalar que al fin los panistas se habían quitado la máscara para mostrar su verdadero rostro de fascistas, episodio este, como muchos otros que vendrán antes del 2024 y van a servir para ir desgastando ante la opinión pública a los partidos y figuras que se perfilan a participar para la presidencia de la República. Los morenos, sin embargo, no quisieran que se recuerde de ellos que, en momentos cruciales como en 2018, recurrieron a la alianza con el Partido Encuentro Social (PES), también identificado con la ultraderecha, para lograr sus fines políticos. Es un ajedrez. Del PAN, desde hace muchos años se ha dicho que está vinculado al movimiento ultraconservador El Yunque que reclutaba a jóvenes para adoctrinarlos en su filosofía, con fines políticos, es decir, no es algo nuevo. Sin embargo, el asunto alcanzó un doble daño, externo e interno, y tardará mucho tiempo para resarcir. Julen, a su vez, va a sufrir las consecuencias dentro de su bancada en el Senado donde probablemente pierda margen de maniobra en su operación, y en el propio Comité Ejecutivo Nacional panista, donde se había posicionado como prospecto emergente a la gubernatura del estado, en caso de que el actual régimen logre descarrilar a los Yunes para impedirles una segunda oportunidad para apoderarse del Gobierno del Estado, como parece que están a punto de lograrlo, si es que prosperan las denuncias en contra del fallido candidato a la alcaldía de Veracruz, Miguel Ángel Yunes Márquez, y su hermano Fernando, actual edil porteño. De ahí que, desde el propio puerto, también se lanzan cañonazos a Julen, aprovechando que se encuentra en el ojo del huracán por el error táctico que cometió. Lo hacen los hermanos panistas y se sumó la académica Hernández Espejo, exigiendo al senador disculparse con el pueblo de México por haber utilizado la sede del Senado para suscribir un acuerdo con esa organización española facciosa, pero en el fondo es ir disminuyendo la capacidad política a Julen, para lo que pudiera ofrecerse más adelante.

opedro2006@gmail.com