En los primeros minutos de ayer domingo, fue liberada (o rescatada) la exdiputada y exalcaldesa de San Andrés Tuxtla, Marina Garay Cabada, según confirmaron familiares y fuentes del gobierno de Veracruz.
Según lo difundido inicialmente, la encontraron lugareños cuando caminaba por un camino vecinal de Catemaco, municipio aledaño a SAT, y al reconocerla la ayudaron y se comunicaron con sus familiares; hasta el lugar se trasladó su hijo, el alcalde Octavio Pérez Garay, para llevarla a su domicilio, al parecer sin presentar lesiones visibles, aunque fue revisada por médicos para constatar su estado de salud. Estuvo cinco días privada de su libertad, y afortunadamente apareció con vida, sin que se conozcan mayores detalles de si fue secuestro a cambio de dinero o si se trató de un asunto de otra índole, incluso de tipo político. Eso se sabrá en su momento, cuando las autoridades concluyan las investigaciones o la familia decida ventilar los hechos verdaderos, incluyendo ese ofrecimiento del edil Pérez para entregarse él a los secuestradores a cambio de su señora madre, y la queja que hizo del involucramiento de las autoridades en el caso, contra su petición de no hacerlo, interviniendo sus líneas telefónicas. ¿Qué fue lo que pasó? Sólo ellos lo saben, cuestión privada que trascendió a lo público y, tratándose de personajes relevantes de la política en esa región, la señora Garay y el alcalde Pérez, sería prudente precisar la información que evite vacíos que puedan llenarse con falsedades. Y, en cuanto a las autoridades, hasta el mediodía de ayer no habían emitido información oficial sobre este asunto, pero se dijo que fue gracias a la coordinación de corporaciones de seguridad como se logró la localización y liberación, aunque tal cosa discrepa de las versiones señaladas al inicio de este texto. Habrá que esperar y saber lo que en realidad pasó. En otro asunto, la denuncia que presentó ante la Fiscalía General del estado el abogado Jorge Reyes Peralta en contra de los hermanos Yunes, Miguel y Fernando, candidato a la alcaldía, uno, y el otro actual alcalde de Veracruz, por presumibles delitos de falsificación de documentos oficiales “para favorecer el registro y candidatura de Miguel Ángel Yunes Márquez”, lleva mucho mensaje. El jurista informó que en el Órgano Electoral de Veracruz (OPLE) consta que Miguel Ángel Yunes Márquez utilizó cuatro constancias de residencia en menos de tres años, una de Boca del Río y tres más en Veracruz, estas últimas en menos de 3 meses, documentos avalados por su hermano el presidente municipal y firmados a petición de éste por los titulares de la Secretaría del Ayuntamiento de Veracruz, el director municipal de Gobernación y tres jefes de manzana, “quienes dieron fe de dicha residencia inexistente y apócrifa”. Según el abogado Reyes, se tienen más de 123 testimonios notariales de que su domicilio es en el municipio de Alvarado, en El Estero, y se recopilaron pruebas de su estancia en Francia entre septiembre de 2019 y marzo de 2020.
opedro2006@gmail.com
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