/ miércoles 4 de agosto de 2021

Sefiplan: fugas y desorden

Contrario a lo argumentado por el secretario de Finanzas y Planeación, José Luis Lima Franco, quien este lunes afirmó que “creemos que es una falta de entendimiento y comprensión de parte de los auditores del Orfis”...

El órgano fiscalizador del estado expuso claramente en su dictamen que “la Fiscalización Superior de la Cuenta Pública del ejercicio 2019 se practicó sobre la totalidad de la información proporcionada por el Ente Fiscalizable (Sefiplan)” y que “la veracidad de la misma es responsabilidad de los servidores públicos que administraron los recursos del ejercicio que se auditó”.

A la dependencia que encabeza el economista pozarricense no le fue nada bien en la fiscalización del Orfis. Por ejemplo, en la revisión al rubro de Efectivo, Caja y Bancos, los auditores detectaron que Sefiplan “no incluye contablemente las cuentas bancarias de acuerdo a lo establecido en el Plan de Cuentas emitido por el Consejo Nacional de Armonización Contable (CONAC), mismas que debieron ser incluidas en los rubros de activo”.

Sobre el “Anticipo a Contratistas por Obras Públicas a corto plazo” por 715 mil 280 pesos, se le observó que “no presentaron evidencia de las acciones para su amortización y/o recuperación”. Y en la revisión de las Cuentas por Cobrar, “se detectó que existe un saldo pendiente al 31 de diciembre de 2019 por un importe de 1 millón 706 mil 651.45 pesos”, y que “no proporcionaron evidencia de las acciones para su recuperación y/o depuración, continuando con adeudos pendientes”.

Respecto a la relación de los Bienes Inmuebles que componen el patrimonio de la Secretaría de Finanzas y Planeación, los auditores del Orfis detectaron “una diferencia de $678,934.01, de la cual no presentaron la relación de los bienes y/u obras que la integran, o en su caso, de las acciones realizadas para su conciliación”.

En cuanto al registro y presentación de las Cuentas de Balance, Sefiplan tampoco presentó en su información financiera “los saldos de las cuentas por cobrar por concepto de presupuesto asignado pendiente de ministración o pago; así como de las cuentas por pagar de las contribuciones federales y estatales, proveedores y prestadores de servicios por concepto de la adquisición de bienes y servicios”. En la Observación FP-008/2019/007 ADM, derivado de la revisión y análisis a la información financiera de la Sefiplan, se detectó que refleja ingresos por ministraciones del Gobierno del Estado por un importe de 6 mil 640 millones 740 mil 069 pesos “dentro del rubro de Otros Ingresos y Beneficios, los cuales debieron ser clasificados y registrados de conformidad con el Plan de Cuentas emitido por el CONAC”; sin embargo, “la Secretaría no proporcionó la evidencia documental de su integración, por fondo y tipo de recurso…” Según el Orfis, Sefiplan ni siquiera ha establecido un “mecanismo de control para la contratación de personas físicas y morales por concepto de servicios profesionales para auditorías y/o asesorías, así como servicios afines, en cumplimiento de los principios de eficiencia, eficacia, racionalidad, austeridad y transparencia”.

Contrario a lo argumentado por el secretario de Finanzas y Planeación, José Luis Lima Franco, quien este lunes afirmó que “creemos que es una falta de entendimiento y comprensión de parte de los auditores del Orfis”...

El órgano fiscalizador del estado expuso claramente en su dictamen que “la Fiscalización Superior de la Cuenta Pública del ejercicio 2019 se practicó sobre la totalidad de la información proporcionada por el Ente Fiscalizable (Sefiplan)” y que “la veracidad de la misma es responsabilidad de los servidores públicos que administraron los recursos del ejercicio que se auditó”.

A la dependencia que encabeza el economista pozarricense no le fue nada bien en la fiscalización del Orfis. Por ejemplo, en la revisión al rubro de Efectivo, Caja y Bancos, los auditores detectaron que Sefiplan “no incluye contablemente las cuentas bancarias de acuerdo a lo establecido en el Plan de Cuentas emitido por el Consejo Nacional de Armonización Contable (CONAC), mismas que debieron ser incluidas en los rubros de activo”.

Sobre el “Anticipo a Contratistas por Obras Públicas a corto plazo” por 715 mil 280 pesos, se le observó que “no presentaron evidencia de las acciones para su amortización y/o recuperación”. Y en la revisión de las Cuentas por Cobrar, “se detectó que existe un saldo pendiente al 31 de diciembre de 2019 por un importe de 1 millón 706 mil 651.45 pesos”, y que “no proporcionaron evidencia de las acciones para su recuperación y/o depuración, continuando con adeudos pendientes”.

Respecto a la relación de los Bienes Inmuebles que componen el patrimonio de la Secretaría de Finanzas y Planeación, los auditores del Orfis detectaron “una diferencia de $678,934.01, de la cual no presentaron la relación de los bienes y/u obras que la integran, o en su caso, de las acciones realizadas para su conciliación”.

En cuanto al registro y presentación de las Cuentas de Balance, Sefiplan tampoco presentó en su información financiera “los saldos de las cuentas por cobrar por concepto de presupuesto asignado pendiente de ministración o pago; así como de las cuentas por pagar de las contribuciones federales y estatales, proveedores y prestadores de servicios por concepto de la adquisición de bienes y servicios”. En la Observación FP-008/2019/007 ADM, derivado de la revisión y análisis a la información financiera de la Sefiplan, se detectó que refleja ingresos por ministraciones del Gobierno del Estado por un importe de 6 mil 640 millones 740 mil 069 pesos “dentro del rubro de Otros Ingresos y Beneficios, los cuales debieron ser clasificados y registrados de conformidad con el Plan de Cuentas emitido por el CONAC”; sin embargo, “la Secretaría no proporcionó la evidencia documental de su integración, por fondo y tipo de recurso…” Según el Orfis, Sefiplan ni siquiera ha establecido un “mecanismo de control para la contratación de personas físicas y morales por concepto de servicios profesionales para auditorías y/o asesorías, así como servicios afines, en cumplimiento de los principios de eficiencia, eficacia, racionalidad, austeridad y transparencia”.

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