Orizaba, Ver.- Locatarios del mercado Venustiano Carranza desde hace nueve años adoran al Divino Niño Jesús a quien se encomiendan para tener salud y trabajo.
Hoy caminan con la imagen por calles del Centro Histórico de la ciudad, para llevarlo a su nicho en la parroquia de San José.
Celestina Santiago Aparicio, comerciante del mejor conocido como Mercado de Flores y madrina de la imagen recuerda que su devoción a la advocación del Niño Jesús data de hace 15 años, por necesidades económicas.
Andaba yo mal económicamente y de salud, estaba en el hospital del Seguro Social, me iban a operar de la columna y una persona me regaló una estampa del niño y me dijo que si yo tenía fe Él me iba a dar mi salud y así fue
Dijo entre sollozos.
Desde entonces comenzó a propagar la devoción hacia el Divino Niño entre sus compañeros locatarios y a Él atribuye que desde hace 9 años ha habido niños (hijos de locatarios) que se han bautizado, que han hecho su confirmación.
"Hay niños que han aprendido por Él a rezar el rosario y ahorita son jóvenes que están en Secundaria y mantienen su devoción" , dijo.
Entre los testimonios que hay en la que se conformó como un grupo de fe, agregó, los hay de personas a quienes secuestraron a algún integrante de su familia, "hicimos la novena con Él y regresaron a su familiar vivo
Y aunque no en todos los casos ha sido así su fe se mantiene.
"Hace un año hicimos oración por otra persona que secuestraron pero lo encontraron muerto, pero gracias a Dios dijo el familiar lo recuperaron, porque cuántas veces no se recuperan ni viva ni muerta a la persona. Ahorita están pidiendo que se haga oración porque hay tres personas desaparecidas en la misma situación", señala.
Para celebrar hoy al Divino Niño Jesús los comerciantes apoyan, doña Celestina confecciona a mano la vestimenta para la pequeña imagen, que no salía del templo desde hace 25 años, pero que ahora le presta el párroco de San José, para que salga en procesión; tres floristas donan su trabajo y hacen las portadas que encabezan junto con tres imágenes la caminata.
Las mañanitas las entonaron a las 6:30 de la mañana y a las 7 se ofició misa para los comerciantes y por la tarde, a las 6 sale la procesión que recorre calles del barrio y regresa al templo donde se coloca de nuevo na imagen en su nicho.
Acompañando a esa imagen, señala doña Celestina, van otras más, que ella ha obsequiado a los comerciantes y su familia, quienes han trasmitido la devoción allende la ciudad, pues este día llegan a celebrarlo devotos de Loma Grande, Mariano Escobedo; de Cuitláhuac, Tierra Blanca e incluso de Coatzacoalcos.
