Orizaba, Ver.- Desde hace casi tres meses, cuando se suspendió todo tipo de fiestas y eventos que requerían del trabajo de los meseros que se desempeñaban en banquetes, Roberto Navarro Cruz e Irma Medrano Alcántara, quienes se desempeñan de manera independiente afrontan un panorama difícil pues no tienen la forma de allegarse de recursos.
Irma Medrano explica que de ella depende su mamá, de 85 años, que por ser mayor de edad e hipertensa permanece en casa pues es parte de la población vulnerable y estar sin trabajo le es difícil llevar algo de comer, por eso junto con algunos de sus compañeros sale todos los días a botear y pedir el apoyo de la población.
La misma situación afronta Roberto Navarro, padre soltero con dos hijos, una pequeña de 9 años y un adolescente de 16. A la niña la deja bajo el cuidado de una persona de su confianza mientras él sale a buscar recurso para llevar alimento a su casa.
Señala que a pesar de que han buscado algún trabajo emergente, no han encontrado, por lo que recurrieron al boteo para obtener un poco de recurso y solventar las necesidades más apremiantes de su familia.
A pesar de que pidieron el apoyo a la autoridad municipal, dijo que ésta la recibieron sólo en una ocasión, por lo que ahora piden que les permitan botear sin ningún problema, pues dijo, se tienen que esconder de la policía para que no los retiren de las calles.
“No le hacemos mal ni estorbamos a nadie. Sólo pedimos el apoyo de la gente, que sí nos ayuda con lo que puede, porque esto (la pandemia), a todos nos pegó”, señala.
Afortunadamente, reconoció, la respuesta de la población orizabeña ha sido buena pues se solidariza y además de darle un apoyo económico los anima y les pide también aguantar lo más que se pueda, mientras pasa lo más difícil de la emergencia sanitaria.
Ambos son, Roberto e Irma son meseros independientes que se anuncian a través de las redes sociales y esperan en un futuro no lejano volver a reunirse para trabajar en las fiestas y eventos con su microempresa de banquetes y mesa de dulces.
