VERACRUZ, Ver.- A 10 años de distancia, las afectaciones y daños que dejó el huracán Karl en el estado de Veracruz, no se olvidan. En una de las zonas más afectadas, como fue la conurbación Veracruz-Boca del Río, los damnificados lo recuerdan como uno de los momentos más trágicos por todo lo que perdieron.
Sin embargo, también recuerdan la tragedia que arrastró Karl como un evento que obligó a los veracruzanos a reforzar su cultura de la prevención en fenómenos naturales posteriores.
Antonio Farfán, residente del fraccionamiento Puente Moreno, una de las primeras zonas en inundarse por el golpe de agua que causó el huracán del 2010, dijo que recuerda el desastre como el peor del que tenga memoria en el municipio de Medellín.
En aquel entonces recuerda que era un día soleado, el huracán había golpeado costas veracruzanas un día antes, pero la lluvia que se acumuló en la montaña causó el desbordamiento del río Jamapa que rápido inundó varias localidades y fraccionamientos de Medellín.
En su casa el agua subió rápidamente, recuerda que perdió todo, desde muebles y electrodomésticos, hasta los juguetes, ropa y artículos personales suyos, de su esposa y sus dos hijos.
Si bien su patrimonio lo perdió en una sola tarde, se dice agradecido porque en su círculo familiar o de amigos el daño solo fue material y no hubo ningún fallecimiento como ocurrió con otras familias.
El huracán Karl impactó en categoría 3 la región centro del estado de Veracruz alrededor del mediodía del 17 de septiembre del 2010, con vientos de 185 kilómetros por hora y rachas que alcanzaban los 235 kilómetros por hora.
Si bien en ese momento los estragos en la conurbación por los vientos arrachados se tradujo en árboles caídos y algunas casas destechadas, fue para el día siguiente, con la acumulación de lluvias en los municipios de la parte alta de la cuenta del Jamapa y Cotaxtla, generó inundaciones en municipios como Medellín, Veracruz y Boca del Río.
Antonio Farfán recuerda que el día que su casa se fue al agua, como todo el fraccionamiento Puente Moreno, era una jornada soleada.
El río comenzó a desbordarse y salió a ver a su abuela que vivía en la comunidad de El Tejar, en donde es común el desbordamiento del río por la temporada de lluvias.
Sin embargo, en el camino se dio cuenta que el agua comenzó a subir súbitamente, no pudo llegar a su destino y decidió regresar con su esposa y sus hijos cuando le avisaron que el agua empezaba a entrar a las casas.
El entrevistado narra que no le dio tiempo de sacar nada, solo de poner a salvo a su familia. Las imágenes que vienen a su mente son de casas inundadas y gente dejando su patrimonio.
A 10 años de distancia reconoce que el hecho fue trágico, pero no debe olvidarse para que la situación, si se repite, no deje los mismos daños que en aquel entonces.
Antonio Farfán afirmó que esta fecha debe de comprometer a las autoridades de los tres órdenes de gobierno para realizar las obras complementarias que permitan evitar que las inundaciones vuelvan a repetirse.
Entre otras cosas, desazolvar canales, construir colectores pluviales y caminos de evacuación en la zona de fraccionamientos que resultó inundada en aquella época.
El huracán Karl en el 2010 provocó afectaciones en 117 municipios, lo que significó el 68 por ciento del territorio veracruzanos; así como Antonio Farfán otras 100 mil personas tuvieron que ser evacuadas de sus casas, algunos de los cuales se quedaron sin vivienda.
El reporte oficial en aquel entonces fue de un millón de veracruzanos damnificados por inundaciones y los vientos huracanados, así como 12 personas muertas a causa del desbordamiento de ríos.
