Amatlan, Ver.- Este 2 de julio se cumplió un año de la tragedia que empañó a la comunidad de La Patrona, dos menores de edad fueron asesinados como daño colateral en un enfrentamiento entre la fuerza civil y presuntos delincuentes, un hecho que autoridades prometieron no quedaría impune, pero hasta el momento sigue sin ser resuelto.
Eduardo de 13 años y Jhonatan de 15 eran dos menores originarios de la comunidad de La Patrona que la tarde del 2 de julio del 2021 lavaban la camioneta de su tío cuando se desató una persecución y balacera en la que presuntamente el fuego cruzado alcanzó a los chicos quienes terminaron sin vida a un lado de la camioneta Ford Lobo.
Al lugar llegaron peritos de la Fiscalía para tomar conocimiento de los hechos y según información de las autoridades ese viernes 2 de julio fueron decomisados dos vehículos y armas sin lograr la detención de ningún presunto responsable de los hechos.
Los pequeños realizaban labores sencillas para ganarse unos pesos que utilizaban para comprar sus útiles escolares debido a que la situación económica de su familia no daba para lujos, pero desafortunadamente ese día la tragedia llegó a perjudicar aún más el panorama de la familia.
Unos días después de este asesinato el Gobernador Cuitlahuac García aseguró en rueda de prensa que este crimen ya estaba siendo investigado y que no habría chivos expiatorios, ahora se trabajaba con certeza y habría justicia, sin embargo ya ha pasado un año y las familias no tienen respuestas.
El mes de abril la Fiscala Verónica Hernández Giagadans llegó a Córdoba acompañada del Gobernador, el secretario de Gobierno y más funcionarios en donde se inauguró la ampliación de la Jefatura Regional de los Servicios Periciales Zona Centro Córdoba y fue abordada por reporteros quienes preguntaron sobre este caso en específico, a lo que respondió que se continua trabajando en la investigación correspondiente e incluso destacó que se tienen avances importantes, sin dar más detalles sobre el tema.
Lo único cierto es que la luz de las veladoras se consumen junto con las oraciones por las almas de los menores Eduardo y Jhonatan quienes dejaron un vacío en el corazón de la humilde familia, un hecho que cimbró a toda la comunidad de La Patrona.
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Fueron muchas las marchas, manifestaciones y movimientos sociales que animaron a los ciudadanos a solidarizarse con la causa, exigir justicia, con el grito de "no fue fuego cruzado, fueron balas del estado", se pedía que los culpables pagarán por los atroces delitos.