Nogales, Ver.- Especialistas de la Secretaría de Protección Civil hacen un estudio en los cerros que fueron devastados por los incendios forestales para determinar el grado de riesgo de algún deslave y conocer cuántas familias son susceptibles a sufrir afectaciones, dió a conocer Luis Palma Déctor, coordinador regional de Protección Civil.
En entrevista previa a la capacitación que impartió personal del Centro Nacional de Prevención de Desastres (Cenapred) sobre "Identificación de peligros y medidas para la reducción de los riesgos por inundaciones súbitas y flujos de lodo" recordó que esta región tiene antecedentes de afectaciones por este tipo de situaciones.
El 5 de junio de 2003, recordó, se registró la barrancada del río Chiquito y lo más próximo fue el 3 de junio de este año en el cerro del Coyote en la colonia Juan Pablo II del municipio de Acultzingo, donde una lluvia que se focalizó en la parte alta de la montaña generó un deslizamiento y deslave de rocas y lodo derivado de los incendios forestales que se registraron hace un mes antes en esa zona, lo que género estos dos fenómenos, uno químico tecnológico y uno hidrometeorológico que provocó afectaciones en más de 32 viviendas.
Esto es claro ejemplo de que sí puede darse esta situación, por lo que hay que estar preparados, tanto la población como la gente de Protección Civil"
Señaló que ese mismo estudio se estaría realizando en cerros Acultzingo y Nogales donde se registraron fuertes incendios forestales y con los resultados del mismo se actualizarán los atlas de riesgo estatales y municipales.
Finalmente, resaltó que en Nogales, por ejemplo, se están haciendo acciones a través de la dirección de Protección Civil como informar a través de los agentes municipales a la población cuando hay una alerta gris o alguna situación que pudiera generar alguna lluvia importante para evitar afectaciones.
