Amatlán, Ver.- Christian Gabriel y José Daniel tienen 22 y 18 años de edad, son hermanos y migrantes. La situación económica en su país de origen; Honduras, los obligó a abandonar su casa hace 19 días y emprender un viaje para alcanzar el denominado sueño americano, sin conocer a nadie, pero con las ganas de lograr una mejor cálida de vida para ellos y su familia.
El camino no ha sido fácil, relatan a El Sol de Córdoba, durante su travesía por México han tenido que viajar algunos tramos a bordo del tren, otros a pie y, los más cómodos, en alguna unidad del transporte público que acepta darles “el aventón”, lo que les ha ayudado a llegar hasta el albergue de apoyo al migrante de Las Patronas, ubicado en la comunidad La Patrona, del municipio de Amatlán, en la zona centro del estado.
- Te puede interesar: Personas salen de sus países por falta de oportunidades: obispo de Veracruz
A pesar de todo, señalan que la experiencia migrante que han tenido no ha sido tan mala como han escuchado de otros connacionales, en su paso por México han encontrado gente que les ha ayudado a acercarse un poco más a la frontera norte de nuestro país e incluso se han encontrado con otros paisanos que, al igual que ellos, van en busca de alcanzar el sueño americano a como de lugar.
Christian y Daniel, como les gusta ser llamados, pasarán este fin de semana en el albergue de Las Patronas, donde descansarán un poco, comerán tres veces al día, se ducharán y agarrarán fuerzas para continuar su camino hacia el norte del país, aunque todavía no sepan la ruta que seguirán a fin de continuar su trayecto con seguridad y sin ser aprehendidos por personal del Instituto Nacional de Migración que trunque su sueño.
“Hemos llegado hasta aquí caminando y en el tren, que ha sido toda una aventura, al menos para mi que nunca había visto el tren, ha sido toda una aventura, hemos escuchado que es peligroso”, relatan los jóvenes hermanos, quienes reconocen que solo al principio se toparon con autoridades que les han pedido dinero para poder dejarlos continuar su camino.
“La verdad que gracias a Dios a nosotros, pues nos ha librado de muchas cosas, porque muchas personas que nos hemos encontrado en el camino, nos comentaban de que les sucedió esto o lo otro y nosotros por la misericordia de Dios hemos venido bien hasta acá donde andamos”, continúan relatando en el albergue de Las Patronas a El Sol de Córdoba.
Ambos jóvenes están conscientes de que estar de migrantes en México es un delito, pero su objetivo de lograr una mejor calidad de vida para su familia que se quedó en Honduras, es mucho mayor y es la razón que los mueve por este país rumbo hacia los Estados Unidos, por lo que adelantan que no se detendrán hasta alcanzar su meta.
"En cuanto a la ley, andar así, indocumentado, es un delito, pero para el migrante, el que viene, el sueño es llegar y la persona, suceda lo que suceda en el camino, lo detengan, pero a pesar de eso, la única motivación de una persona es estar del otro lado, en Estados Unidos”, dicen los jóvenes que insisten estar solos en esta aventura.
¿Qué opinan sobre las nuevas acciones para impedir el paso de migrantes?
Al cuestionarles sobre las nuevas acciones emprendidas desde los Gobiernos de México y Estados Unidos para frenar la migración, Christian y Daniel, señalan que quizá puedan funcionar, pero no por mucho tiempo, puesto que las personas que salen de sus casas para buscar una mejor calidad de vida no se detendrán por nada para alcanzar su meta.
¿Ya nos sigues en Google News Showcase? Es gratis
Por lo que dicen que tras tomar energía y un poco de fuerza continuarán su camino hacia el norte del país, ya con el paso de los días y a como vean la situación al norte de México decidirán si intentan cruzar a los Estados Unidos o buscar algún empleo en nuestro país para obtener algún ingreso que les asegure su alimentación, mientras deciden qué harán.