Córdoba, Ver.- La iglesia católica de Córdoba cuenta a partir de este jueves con tres nuevos sacerdotes y un diácono, mismos que fueron ordenados por el obispo Monseñor Eduardo Carmona Ortega, durante los festejos a la Inmaculada Concepción.
Los seminaristas Manuel, Jorge, Francisco, fueron ungidos como nuevos sacerdotes de la iglesia católica en la Diócesis de Córdoba, lo que representa una fiesta para la feligresía católica de esta zona que se sigue fortaleciendo en cuanto a la fe más en estos tiempos donde los fieles se preparan para la navidad.
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“Es una vivencia muy grande para la iglesia de Córdoba, siempre sacerdotes nuevos traen como un refrescamiento, como una vida nueva, una nueva esperanza, ustedes saben que para que estos jóvenes lleguen al sacerdocio son muchos filtros que deben pasar”, comenta el obispo Eduardo Carmona Ortega.
¿Qué pidió el obispo Eduardo Carmona Ortega a los católicos de Córdoba?
Quien destaca que como pastor de la iglesia católica está muy contento por estas nueva ordenaciones y pide a la población rezar por ellos para que puedan ejercer el ministerio de Dios de la mejor manera y siempre buscando fortalecer la fe de la ciudadanía.
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Comenta que con la llegada de estos nuevos sacerdotes se iniciarán los cambios a fin de que se pueda cubrir cada una de las vacantes que pudiera haber con el retiro de algunos padres ya sea por cuestiones de salud o por deceso.
Monseñor Carmona Ortega señala que ante los retos que se viven actualmente, los nuevos sacerdotes deben estar listos para poder orientar a la feligresía y sobre todo para continuar fortaleciendo el tejido social para formar nuevos ciudadanos con valores y principios de unidad y comunidad.
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“Los nuevos sacerdotes tienen la tarea de seguir, con la luz del evangelio, iluminado a la generación actual y es lo qué no hay que estar discerniendo”, precisa el máximo jerarca de la iglesia católica de la zona centro del estado.
Apunta que actualmente hay más de 80 sacerdotes que atienden a largo y ancho de los 28 municipios que integran la Diócesis de Córdoba, pues reconoce que en los últimos años han fallecido al rededor de diez sacerdotes, de los que cinco perdieron la vida por Covid-19.
