Orizaba, Ver.- Ruidos y siluetas fueron captados durante la última incursión del grupo OriOvni en el exconvento de San José de Gracia, en 2004. La evidencia de estos fenómenos paranormales quedó plasmada en fotografías y videos.
Juan Carlos Varela, investigador de lo paranormal recordó que no era la primera vez que entraban a ese edificio a pesar del riesgo que representaba, pues estaba cayéndose. “Entrábamos a escondidas, en la noche y teníamos la idea de hacer algo para evidenciar lo que ahí podía haber”.
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Fue un grupo de cerca de 12 personas, que participaban en un programa de radio de Paco García, el que se organizó, solicitaron los permisos del Ayuntamiento y prepararon la incursión que sería de toda una noche.
Como el inmueble estaba en ruinas se les proporcionó supervisión y apoyo de Protección Civil y Bomberos, para atender cualquier situación de emergencia. “Entramos con overoles, con el equipo de radio y con cámara, lámparas y todo lo necesario”.
El edificio estaba por caerse, era muy probable que encontraran algún animal ponzoñoso; caminaban de lado porque el piso se sumía con el peso y algunas celdas ya no lo tenían y si uno de los investigadores caía con él se iban todos.
El día anterior a su investigación Juan Carlos Varela fue durante la mañana para marcar la ruta que seguirían por la noche pues la única luz que tendrían sería la que ellos llevaran.
Pasaron cosas muy extrañas, por ejemplo, mientras un compañero grababa mientras marcaba las paredes para identificarlas por la noche, de repente un compañero hace un paneo hacia la derecha, atrás de mí y después continuó grabando.
Cuando revisaban el video ya con todos los que participarían, detectaron que atrás de Juan Carlos había algo atrás de él. Checaron y trataron de identificarlo pues parecía un gato, un cuervo. Lo pasaron a digital y en la computadora lo vieron, no era gato ni cuervo; parecía un monje. Vieron en qué lugar era para revisar por la noche y confirmar lo que era.
“Cuando entramos a ese lugar nos topamos con que estaba vacío, no había piso ni techo, no había nada. Pudo ser un cuervo, pero estos no se acuestan ni levantan, era un monje… fue algo grandioso”, enfatizó.
Agregó que en el exconvento había un lugar con mucha energía. “Es un lugar súper pesado, porque el equipo que llevábamos se descargó, no duró nada; todo lo que llevábamos se acabó, “a humedad lo descargó”.
¿Cuáles son las evidencias que encontraron en el exconvento de san José de Gracia?
Gasper, otro de los investigadores hizo algunas imágenes en otra parte del edificio y al momento de revisarlas detectó siluetas queriendo entrar y rostros en la pared. “Todos los que iban con nosotros: bomberos, la policía, Cruz Roja, todos se quedaron boquiabiertos al verlo”.
Recordó que personas que vivieron en ese lugar, pues también fue utilizado como vecindad, decía que se aparecía un monje. “Pasan cosas muy raras, nos quedó la duda que era lo que se veía”.
Nota publicada en El Sol de Orizaba
