Coetzala, Ver.- Con el fin de rendir tributo a la madre tierra, agradecerle por las cosechas del año anterior y pedir que para que las de este año sean igual de buenas, habitantes de Coetzala realizaron este primer viernes de marzo, día en que inicia el año nahua, el ritual Xochitlalli o Flores para la Tierra.
Este ritual proviene de los ancestros, de las culturas que ocuparon esta región y con él rendían tributo a la madre tierra por todo lo que les brinda año con año y en los últimos tiempos se realiza con el objetivo de rescatar los saberes ancestrales; gastronómicos, herbolarios, artesanales propios de esta región de Veracruz.
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Es un momento para que los seres humanos se reconecten con la madre tierra, recordando que como raza pertenecemos a la tierra y al final de nuestros días volveremos a ella al convertirnos en polvo, explica Delfino García García, encargado de realizar el ritual de agradecimiento a la tierra.
Dentro de la Cueva del Sol se colocó un altar con piedras de la misma montaña , misma que fue adornada con flores y veladoras, posteriormente fue bendecida con agua, ron, tequila y aguardiente, tal y como se hace desde hace décadas en esta región del país.
¿Qué se pide a través del ritual Xochitlalli?
A través de este ritual se pide también a los ancestros la iluminación y el conocimiento necesario para mantener el equilibrio entre lo terrenal y lo espiritual, entendiendo que como seres vivos estamos hechos de materia física, pero también tenemos alma que al abandonar nuestros cuerpos vuelve a la naturaleza misma.
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Tras el ritual los pobladores y asistentes disfrutan de danzar el xochipitzihuatl que es una danza originaria de esta región que se utiliza para festividades importantes de la comunidad, siendo una oportunidad para que las nueva generaciones conozcan tradiciones que dan identidad a nuestro país y que se han preservado aún después de la conquista española y con el paso de los siglos.
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Gran parte de este ritual de agradecimiento se hace en náhuatl que es la lengua madre esta zona y de este municipio con un alto porcentaje de población indígena cuyo objetivo es continuar manteniendo las tradiciones de un pueblo que se niega a destaparecer, explican las mismas autoridades municipales.
Se cree que la Cueva del Sol fue habitada por antiguas civilizaciones pues en su interior hay vestigios de pinturas rupestres cuyo significado aún no se descifra y tampoco existe una explicación de cómo fue que se hicieron ya que se encuentran en una parte alta de la misma cueva.
