Orizaba, Ver.- Sigue siendo un problema el robo de taxis, pese a que es menor la incidencia, cuando ocurre es un duro golpe para los concesionarios, quienes ven sus pérdidas económicas, dijo Jairo Guarneros Sosa, líder del Grupo Regional Independiente de Taxistas de Orizaba (GRITO).
El declarante comenta que en lo que van de este 2024 han robado aproximadamente 10 unidades en la región y aunque algunos han sido recuperados, presentan daños o la falta de autopartes, en su mayoría llantas y espejos.
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“Afortunadamente, ahorita no han sido muchas, por lo menos de las que nosotros como organización nos hemos enterado, han sido alrededor de unas 10 unidades y estamos pidiendo que el pago del corralón sea considerado y que sea absorbido por el Estado como parte de la reparación de los daños”.
Además del robo, recuperar la unidad sale carísimo
El dirigente también denunció los altos costos que implica recuperar una unidad robada, siendo el primer pago el de corralón, pagando también por el arrastre, las copias de documentos y, en algunos casos, incluso sobornos a agentes de la Fiscalía.
Guarneros Sosa calcula que los costos de recuperación pueden llegar hasta los 30 mil pesos, sin contar las pérdidas por el tiempo que la unidad está fuera de servicio, donde se entregan cuentas por día.
Ante esta situación, los taxistas exigen a las autoridades medidas más contundentes para combatir el robo de unidades.
Por lo anterior, proponen que el Estado asuma los costos de la recuperación y agilice el proceso de entrega a sus propietarios.
Sin dar más detalles, esperan próximamente tener un acercamiento con las autoridades para aclarar este tema, pues si bien la cifra dada es en Orizaba, confirma que puede haber más casos en otros municipios.
