Córdoba, Ver.- La sastrería Alcaraz en Córdoba tiene una tradición de más de 75 años, José Juan Alcaraz Durán es quien personalmente la atiende y relata que fue herencia de su padre, el señor José Alcaraz García, quien inició en el año de 1949.
Este negocio ubicado en la avenida 5 entre calles 1 y 3 a una cuadra del Palacio Municipal inició hace 75 años pero metros más adelante aunque en la misma cuadra.
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Entrevistado en su mesa de trabajo, rodeado de hilos, agujas, telas que estaba cortando y algunas máquinas de coser, el señor José Juan refiere que su padre quiso que estudiara una carrera profesional y así lo hizo, se dedicó a la ingeniería mecánica eléctrica y obtuvo su título.
Laboró 10 años en distintas industrias pero extrañaba su casa y habló con su padre en el año de 1988 para que lo dejara aprender este oficio a sus 34 años de edad.
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A partir de ahí y hasta ahora esta en esta sastrería en donde el tiempo parece que se ha estacionado.
En el área tiene fotografías de su padre, sus herramientas de trabajo enmarcadas, algunas imágenes de unos santos, vitrinas y telas, es su taller donde elabora trajes sastres, smokin, camisas, pantalones y demás prendas hechas a las medida y gusto de sus clientes.
Considera que no hay competencia pues ya a los jóvenes no les interesa aprender el oficio que considera es muy noble.
"Si acaso hay cuatro sastres en todo Córdoba pero ya nadie quiere aprender, a mi me gusta mucho mi oficio, y yo quería irme a la Asociación Nacional de Sastres en México terminando la preparatoria pero mi padre no me dejó, me dijo que primero una carrera y luego veíamos".
Aunque trabajo 10 años en su profesión buscó la manera de que su papá aceptara que quería ser sastre y finalmente lo aceptó y aquí sigue pues su padre falleció en 1994.
¿Por qué las nuevas generaciones ya no se interesan por el oficio?
Reitera que a los jóvenes ya no les gusta aprender oficios, quieren lo fácil, antes era un gusto llegar a estos lugares y antes de aprender ayudar sin ganar y ahora ponen sus condiciones y menos aprender.
En este lugar lo ayudan dos personas y afortunadamente tiene trabajo pues sus clientes son fijos incluso de otros estados del país que saben la calidad de su trabajo.
Pese a que la industria del vestido es cada día más barata, en su caso señala que la gente que sabe vestir no acude a las tiendas sino con un sastre que le hace su ropa a la medida.
La sastrería Alcaraz da servicio de lunes a viernes de 10 de la mañana a 3 de la tarde y de 4:15 a 8 de la noche y sábado de 10 de la mañana a 2 de la tarde.
Su gusto es atender a sus clientes y preparar sus trabajo para entregar una buena prenda.
