Orizaba, Ver.- Sin la multitud que en la víspera del día de Fieles Difuntos llegaba al Cementerio Municipal Juan de la Luz Enríquez, los orizabeños recordaron a sus muertos. Aunque el camposanto estuvo abierto hasta las tres de la tarde, la afluencia no se comparó con la del año anterior.

Las avenidas lucieron con poca gente, pues la autoridad avisó con tiempo que el panteón cerraría sus puertas el domingo 1 y lunes 2 de noviembre, que históricamente son los días en los que se reúnen entre 15 mil y 20 mil personas que llegan a convivir con sus difuntos.

Su visita generó, en algunos comercios de flor que hay en la periferia, un ligero repunte en sus ventas, aunque tampoco se comparan con las del año anterior, aunque como la población acudió a lo largo de la semana en esos días tuvieron un poco más de ingresos.

El lugar, que estos días se vestía completamente de color morado y naranja y olía a flor de cempaúchitl, lució un poco gris, pues no todas las sepulturas recibieron visita.

Al interior del camposanto, hasta antes de que comenzara la pandemia, algunos comerciantes ofrecían sus productos: antojitos típicos, nieve o fruta, a las personas que llegaban a limpiar la tumba de sus familiares; sin embargo, cuando cerraron el panteón, ellos se retiraron y aunque nuevamente se abrió al público ya no se instalaron porque no lo permite la emergencia sanitaria.

Estas fechas generaban también ingreso para los varones que se acercaban, con permiso del Ayuntamiento, a realizar faenas que ofrecían a los deudos; este año no tuvieron oportunidad de ganarse unos pesos, porque la afluencia disminuyó considerablemente.

Las actividades culturales que se realizaban desde hace algunos años, como la Noche de Muertos y exposición de ofrendas, por las que el cementerio permanecía abierto toda la noche del 1 y 2 de noviembre, se suspendieron.

Así, a la distancia, los orizabeños recordarán a sus difuntos, con la esperanza de que el próximo 2021 puedan volver nuevamente al cementerio a convivir con ellos.

El decreto que emitió el gobierno del estado se puso en marcha a partir de las 15 horas de este sábado y se mantendrá hasta las 8 de la mañana del 3 de noviembre, cuando se abran nuevamente las puertas del panteón.

El cementerio permanece cerrado al público, sin embargo, continúa vigente el servicio de inhumaciones.