Córdoba, Ver.- Consiente de la existencia del Covid-19 y tomando este como ejemplo de que nada debe de frenar los sueños, Carlos Trujeque un joven de 26 años salió de Puerto Vallarta rumbo a Mar de Plata, Argentina donde el viaje para ir por sus sueños y un encuentro con el amor le esperan luego que culmine su travesía.
Con un poco de dinero, su bicicleta y su motivación principal, Carlos salió de Puerto Vallarta el 01 de noviembre y será en aproximadamente 4 a 5 meses que llegue a su destino final; luego de postergar muchos meses este sueño que tenía con un objetivo personal de descubrirse así mismo, pero con la meta de fijar en la sociedad que la pandemia de coronavirus no puede detener los sueños.
“El virus lo veo como una motivación y como me lo dijo un amigo que esta pandemia nos hace que nos movamos , es una presión, las mejores cosas se han hecho durante las guerras, en pandemias y eso me motiva”.
Carlos Trujeque, es nacido en Córdoba pero a los 12 años dejo la ciudad pues sus padres por un negocio familia tuvieron que mudarse a Puerto Vallarta donde volvió a empezar su vida estudiantil y social, en ese lapso conoció a Agustina, una joven originaria de Mar de Plata, Argentina, otra meta para este trotamundos que está recorriendo por días kilómetros a bordo de su bicicleta.
Él se dedicó al negocio junto a su familia, posteriormente puso un negocio de waffles, pero para seguir su sueño de conocer costumbres, tradiciones, ciudades y pueblos a bordo de su bicicleta tuvo que dejarlo.
“Este viaje puede aportar que si existe la pandemia y que se vivirá así, pero que tenemos que salir con nuestras metas por delante, no existen limitantes”.
Ha contado su historia a cada lugar que llega lo que le ha valido de poder apoyarse con comidas y lugares donde dormir ya que por seguridad no porta cosas valiosas y dinero en efectivo, sin embargo mencionó que su única posibilidad que le haga desistir de su viaje es que le roben su bicicleta.
El joven ciclista dijo que no ha sido fácil viajar con la pandemia pues muchas ocasiones le ha tocado ver que la gente le “teme” y por ello ha optado en llevar las medidas de sanidad y no acercarse a las personas. Se practica la prueba del virus.
Carlos se preparó física y emocionalmente para este viaje, donde cada 15 días se da más de un día para descansar sus músculos. El día de ayer llegó a su natal Córdoba y mañana martes saldrá rumbo a Coatzacoalcos.