Córdoba, Ver.- El viejito, es una tradición de fin de año que se sigue realizando en la zona centro para despedir el año viejo, la quema de muñecos rellenos de aserrín y pirotecnia se preserva al paso del tiempo aunque también hay quienes están en contra por considerar que se contamina el ambiente.
La quema de estas figuras significa despedir al año que termina, es una tradición celebrada en varias regiones de México misma que simboliza la despedida del año saliente, “quemando” todo lo negativo que se vivió y dar la bienvenida al nuevo año señala Oscar Ocampo, quien vende "viejitos" año con año.
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Refiere que es una tradición que se ha extendido por varios estados del país para celebrar las fiestas de fin de año.
"A finales del mes de diciembre se elaboran los muñecos simulando a hombres viejos con cabello y barba blanca, y vestidos con el atuendo que regularmente se use en la región, como paliacates, trajes de manta, sombrero y hasta cigarros o puros, también se les ponen la máscara de algún político o enfermedad hace unos años fue el Covid-19", expuso.
De qué están hechos los muñecos que simbolizan al año viejo
Estos personajes de trapo se rellenan con telas y periódicos usados o aserrín. Se les sienta en una silla con un letrero en el pecho que dice: “una limosnita para este pobre viejo, que ha dejado hijos para el año nuevo”. Esta acción es para recolectar en un bote o lata, el dinero para comprar dulces a los niños y pirotecnia para el día de la quema, que se realiza la noche del 31 de diciembre.
El día de la quema, se carga al viejo recorriendo las calles, acompañado de sus comparsas: bailadoras, músicos, y se baila con el despidiendo el año.
Para el momento de la quema, se mete entre los ropajes los cohetes y al quemarse se cree que con ello todos los males se van y así se recibirá un nuevo año con buenas vibras.
Los costos de estos muñecos van de los 100 a los 200 pesos más la pirotecnia, en varias partes de Córdoba los puedes encontrar sobre todo en las colonias donde se preserva la tradición.
