Córdoba, Ver.- Autoridades educativas en Veracruz cuentan con un protocolo para atender los casos de acoso escolar y en el caso de Córdoba si hay seguimiento en estos, se le brinda atención total al niño y su familia señaló Sara Gabriela Palacios Hernández, titular del Sistema de Protección Integral de los Derechos de las Niñas, Niños y Adolescentes (SIPINNA) en Córdoba.
"Trabajamos de la mano de la SEV, con inspecciones escolares, las escuelas y nosotros, se lleva a cabo una investigación completa, se le da atención cuando nos lo piden la Secretaría de Educación, no es un proceso de dos días. Aparte vemos el tema familiar porque hay focos rojos del porqué el niño es agresivo y si se detectó antes hay que actuar".
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La funcionaria explica que tienen casos donde los niños que son acosados son cambiados de salón o de escuela pero todo se realiza con discreción siempre atendiendo los derechos de los estudiantes.
Niños agresivos son un reflejo de su vivencia en su hogar
Mencionó que en esta nueva generación tanto niñas como niños se pelean, tiene comportamientos agresivos pero es un tema familiar, es un reflejo de lo que viven e su hogar, quizá viven violencia o son violentados, no tienen quien los cuide o el cuidado es el mínimo porque los padres son ausentes, dependen de los abuelos y ellos ya no tienen la fuerza para atender a un adolescente.
¿Qué pasa con los padres de estos niños?
Palacios Hernández mencionó que en estos casos los padres de estos niños deben de tener una sanción pues cometen una omisión de cuidado y es una irresponsabilidad no saber qué pasa con sus hijos.
Mencionó que si los padres detectan este tipo de situaciones pueden buscar ayuda y no es cuestión de dinero pues el sector salud da atención psicológica gratuita igual que el Sistema DIF.
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Mencionó que si un niño o adolescente sufre bullying debe acercarse a las autoridades educativas, hacer llamada al 089 o al 911 si se sienten en peligro, también al 075 del Instituto de la Mujer en caso de ser niña.
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Aunque reconoció que a un niño o niña le es difícil denunciar más a una edad temprana pues muchas veces son amenazados, por eso insiste en que los padres deben estar muy pendientes de sus hijos y los menores les tengan confianza.
