Córdoba, Ver.- Para don Edmundo Marín de la Luz, la tradición de poner el nacimiento en época decembrina viene desde su infancia. Recuerda que cuando él era niño su abuelo le inculcó la tradición, ahora él le enseñó eso mismo a su hijo y espera que se vaya pasando de generación en generación.
Edmundo Marín fue acreedor de un reconocimiento en 1987, cuando colocó un nacimiento tradicional que ganó un primer lugar en la ciudad de Córdoba.
Con este ejemplo de más de 30 años en su familia, ahora dejó un mensaje para los jóvenes: inculcar dichas tradiciones y el espíritu de las cosas buenas, así como no perder la emoción de tener dicha tradición en los hogares.
Dice que se ha empeñado en lograr que se difunda esa tradición entre los más niños para que mantengan la fe y la emoción. En esta ocasión don Edmundo montó en el patio de su casa un nacimiento que fue decorado con un arco de troncos que él mismo armó.
Acompañó dicho nacimiento con figuras que tiene guardas y que cada año las saca de sus cajas y las limpia con mucha delicadeza.
Desafortunadamente no conserva figuras de antaño, puesto que como mencionó con el paso de los años se van despintando y pierden su forma.
Cabe mencionar que dicha tradición en México data desde 1223, cuando san francisco de asís fue el primero en instalar un nacimiento viviente para ejemplificar el origen de Jesús.