Córdoba, Ver.- La comunidad de San Bartolo se ubica a unos 20 minutos del centro de la ciudad, esta enclavada en la zona serrana del Gallego, pese a que tiene unos 80 habitantes se ha convertido en un punto de referencia para quienes gustan del turismo rural pues los fines de semana y en vacaciones recibe decenas de visitantes quienes buscan probar el café que ahí se produce.
Juana Guzmán Campos, productora y comercializadora, relata que inició con un pequeño negocio de café molido y tostado, poco después se capacitó y junto con su familia implementó un recorrido que sale del centro histórico de Córdoba hacia la comunidad, en donde ofrecen desayunos con alimentos orgánicos que ahí se producen, pero además llevan al visitante a recorrer las fincas para que conozcan todo el proceso del café desde la mata hasta que llega a la taza, a la par tienen un taller de elaboración de galletas y bisutería de granos, se trata de disfrutar la mañana completa en la zona pues también hay un mirador en donde se disfruta de una panorámica sin igual.
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En entrevista menciona que no todo ha sido fácil pues les hace falta promoción para que los visitantes lleguen a esa comunidad, pocos saben que ofrecen servicios de turismo rural que es completo y económico, que a la par ayuda a que tengan ingresos para las familias que ahí habitan pues entre todos se ayudan .
La señora Juanita como es conocida por mucha gente, destaca que los recorridos se piden en la oficina de Turismo ubicada en el Museo del Café en la avenida 3 y calle 3, de ahí se programan para llevarlos a la sierra donde disfrutan de los paisajes.
¿Cuándo inició este proeyecto?
El proyecto inició hace 8 años aproximadamente y poco a poco ha ido creciendo, ya tienen un horno para hacer galletas, el taller de bisutería y una cafetería, además ofrecen visitas guiadas a las fincas cafetaleras y la pequeña capilla del lugar que también es parte del recorrido mañanero con olor a café.
Lo único que necesitan es que alguien los apoye a promocionar pues tienen poco conocimiento de las redes sociales y solo es de boca en boca como logrado posicionarse como un lugar especial para los amantes del turismo rural.
En Semana Santa esperan tener mas visitas y ya se alistan para recibir a quien lleve gusto de visitar las fincas cafetaleras, probar un café de especialidad y además deleitarse con la comida preparada en leña y cazuela de barro, pero además orgánica.
